Hasta hace un poco más de dos años, yo no me consideraba una persona deportista. Jugaba fútbol un par de veces al mes, aunque una vez que entré a la universidad ya no me quedaba tiempo ni para eso. Más allá del fútbol, me gustaba la fiesta, dormía hasta tarde los fines de semana, y mi estado físico no era el más envidiable. A pesar de eso, mi papá, ciclista de toda la vida, insistía en que le de un chance a la bici, que pruebe a ver que tal. Tomó tiempo, pero finalmente, cuando a mis amigas les picó también el bichito del ciclismo, decidí probar. Fue épico. Me caí más veces de las imaginables, pasé más tiempo en el suelo que sobre la bici. Pero desde ese momento, mi vida dio un giro de 360 grados.
Un par de meses después estaba corriendo mi primera carrera junto a mi papá: 40km de bici de montaña, en parejas. Mi meta personal fue cruzar la meta, y no en último lugar. !Fue una de las carreras más difíciles de mi vida! Sufrí en la partida por la cantidad de gente, en las cuestas eternas y en las bajadas me ponía nerviosa de caerme y no poder sacar el pie del clip. !Pero lo logré! Cruce la meta y le abracé a mi papá llorando de la emoción: !no éramos los últimos de la categoría!
Desde ahí la cosa tomó un paso acelerado. Mis amigas y yo éramos parte de un muy pequeño grupo de mujeres involucradas en el ciclismo y el deporte de aventura, que para ese momento ya había entrado «por default» en nuestras vidas. Y eso nos motivó a hacer cosas grandes. Nos indignaba ver que los equipos ecuatorianos «importaban» mujeres de fuera para correr aventura, y que las competencias estaban dominadas por hombres. Fue entonces que, sin nada de experiencia, nos lanzamos a nuestra primera locura: en Febrebro del 2013 corrímos el Huairasinchi en categoría aventura, es decir, tres días de competencia por etapas, con campamento entre día y día, y nos convertimos en el primer equipo 100% femenino en completar un Huairasinchi. Vinieron muchas carreras más, una tras otra. Mejoramos el nivel cogimos experiencia, y nació Guambras: 7 chicas, amigas, jóvenes, que disfrutan del deporte, y sobre todo de hacerlo juntas. El primer equipo de aventura 100% femenino del Ecuador.
Cuando supimos que Ecuador iba a ser la sede del mundial de aventura en el 2014, nuestra ilusión era poder ser voluntarias y conocer a todos los corredores famosos que venían! NUNCA se nos ocurrió correr. Fue por eso que concentramos nuestros esfuerzos y recursos en viajar a Untamed New England en Junio del 2014. Esta fue nuestra primera experiencia en carrera tipo expedición, y la verdad es que nos sorprendimos a nosotras mismas. Fuimos el único equipo 100% femenino de la competencia: Daniela León, Victoria Calisto y yo de las Guambras, junto a la Colombiana Carolina Pinilla. A pesar de perdidas épicas, algunos reenganches, y muchas «novatadas», logramos cruzar la meta, y sobrevivir 4 días de carrera ininterrumpida. Nos sorprendimos a nosotras mismas, y cuando volvimos a casa, la idea del mundial empezó a rondar.
Daniela y yo sabíamos que queríamos correr juntas, pero también sabíamos que no teníamos la suficiente experiencia para lanzarnos solas a una cosa así, el resto del equipo debía ser gente con experiencia. Por cosas de la vida, nos pusimos en contacto con Ryan de los Bivouac Colts de Nueva Zelanda, e incluso después de varias advertencias por parte nuestra con respecto a nuestro nivel y experiencia, decidió venir al Ecuador junto con su coequipero Dayne McKnight, a correr con Daniela y conmigo. Estabamos paralizadas del miedo: no solo íbamos a correr un mundial de aventura, si no que lo íbamos a hacer con los 10mos mejores del mundo.
No quiero hablar de esos 7 días de mundial, ni de lo que vivimos, sentimos o aprendimos, porque es muy difícil ponerlo en palabras. Una experiencia así es imposible de contar. Pero gracias a la experiencia de Dayne y Ryan y su motivación a exigirnos buscar más y llegar más allá, y gracias a la valentía de Daniela y su apoyo al momento de decidir hacer cosas locas, llegamos en puesto 17, y 3eros entre los equipos ecuatorianos. De los 50 equipos compitiendo, solo 22 completaron la ruta. Además, fuimos uno de los tres equipos con dos hombres y dos mujeres, de los cuales uno llego en puesto 22 y el otro no hizo la ruta completa. Cuatro personas que en su vida habían entrenado juntos, de nacionalidades distintas, con niveles de experiencia extremadamente diferentes, lograron lo que para mi y Daniela era impensable.
Fotografia: Aya Kubota
A lo que voy con todo esto de contar mi historia y no centrarme en lo que fue el mundial, es porque creo que no se debe mirar a las carreras como experiencias aisladas o logros individuales. Los logros se vuelven mucho mas interesantes cuando miras el camino que has recorrido para llegar a donde estás. Y en mi caso, ese camino ha sido bastante rápido, intenso, y de golpe, y me he demostrado a mi misma que con ganas y determinación, se logra cualquier cosa. Me he dado cuenta que ninguna meta es más importante que otra, porque tanto esos 40km de bicicleta que hice hace dos años como el mundial de aventura, me llenaron de la misma manera el momento en que crucé la meta. Porque lo importante es lograr lo que te propones, y no importa por donde empieces o cual sea tu primera meta, lo importante es dar ese primer paso.
Info:
María Vallejo.
Soy ecuatoriana de 24 años. Practico deporte de aventura desde hace recién 2 años. Soy parte del equipo femenino «Guambras» el primer equipo 100% femenino de aventura en el Ecuador. Para el mundial, Daniela León y yo, de las Guambras, queríamos juntarnos con alguien que tenga un poco más de experiencia, ya que somos relativamente nuevas! Fue entonces que nos pusimos en contacto con lo chicos del equipo Bivouac Colts, Ryan Thompson y Dayne McKnight. Su equipo está rankeado como 10mo en el mundo, y a Daniela y a mí nos asustaba mucho correr con corredores de este nivel. Pero nos fue realmente bien! Ellos nos «jalaron» gracias a su experiencia, y nos motivaron a lograr un resultado mucho mejor de lo que nunca nos habríamos imaginado.